Y se hizo la luz, y la luz era Roma
Fotos: Gabriela Guerra Rey (tomadas de celular) Cada hombre es del tamaño de su jaula… Cada hombre es del tamaño de su jaula. Hoy he empujado los barrotes hasta hacerlos retroceder tanto, que he viajado
Fotos: Gabriela Guerra Rey (tomadas de celular) Cada hombre es del tamaño de su jaula… Cada hombre es del tamaño de su jaula. Hoy he empujado los barrotes hasta hacerlos retroceder tanto, que he viajado
Foto: Gabriela Guerra El último de los poetas malditos, ese ser de luz y de tinieblas, que lucía con autenticidad todos los rasgos del primero de los calificativos, ha muerto. Paco (Francisco Martínez Negrete), querido,
…Matar un enano, pero más que eso, ¡descubrir que puedo ver a mi ciudad de siempre desde otra mirada, a pesar de tantos años y tantas cosas! No podía imaginar que correr en La Habana
Ya no estaré, nunca más, esperándolo en un bar del centro de París, molesta porque va a llegar tarde. Ya no volveremos a caminar desesperados y sin justificación por las calles nocturnas de un barrio
Fragmento de Tres en una taza, Froilán Escobar A Lezama, los enfermeros tampoco podían sacarlo de su casa por la puerta, porque: hinchado por la fiebre y porque los riñones no le drenaban, estaba lleno
Crónica de un maratón (CDMX, 28/ 08/ 2016) Hace apenas un trienio escribí mi primera crónica de vida en México. La titulé: “A tres años de aterrizar en México, todas las nostalgias…”. Hoy, tres años después,
En los años sesenta en Cuba, tras el triunfo de la Revolución, creció una generación de intelectuales, artistas y escritores, cuyas obras, publicadas o no, marcaron una etapa fundamental en la literatura y la cultura
Subirme al barco, no volver el rostro, olvidarme de lo que dejo atrás, no pensar más que en el océano infinito y las aventuras que él me guarda, buenas, grandiosas, malas, terribles, desoladoras, escalofriantes…, tal
Esta mañana me desperté a las 5 am. Había mirado el reloj a las 2, a las 3 y algo, y luego cerca de las 4:45. Aunque estaba cansada y dormí profundamente, en el sueño
He esperado veintisiete años por este día. Desde el amanecer oscuro, como si estuviera atardeciendo; desde que el aire violento entró por la ventana y echó abajo las pocas flores del jardín artificial, supe que