Muralla se colma de laureles. No es anomalía congénita.
Es viento, soplo, resurrección, succión,
erección, erupción.
Entorno interior de cuya recorrido llegan conspiraciones
y aliento espiritual.
Se departe conciencia y mente, vociferan almas silenciosas,
escarceo a voluntad, nefandas palabras, somero balbuceo.
No predecibles intuiciones de la lengua.
Hacienda, permanencia, extensión, vibración, nostalgia.
Demencia equilibrada. Dignidad lírica. Prosperidad animal.
Universo Diverso y Hablado y Transfigurado.
Natural, tanteamos a espejos, cojeamos a ojo,
se fomentan asociaciones indestructibles. Y destruibles
hasta el borde de las cenizas.
Entre superficies y esencias y particularidades, estallidos
de arrojo horizontal. Tal unicidad confabula y duplica,
cohesión cotidiana palpable que exige, adjetiva
con atrevimiento o mesura, a palpitar o morir.
Al fin una definición que no devalúa a la poesía.
Un enunciado que no menoscaba al poeta.
Humanidad salta del aburrimiento ideológico
al desvelo rimado,
del Valle de Lágrima dogmático a la pasión métrica,
del encarcelamiento político al verso libre y la guitarra.
A desvelar puertos. A despertar desiguales y ofrecer
al ojo natillas y pesadillas. A desenterrar palpitaciones
y cadáveres.
A desentrañas poderes ilegítimos y riquezas bajo sospecha.
Universo sin previas precauciones y significados: procedimiento
activo, vehemente acumula, progresivo y gradual. Orbe donde
unos germinan de lo existente o se oscurecen en la defunción
de otros. Amanece: muralla se atesta de rebeldías e indignaciones. Utilizar la armónica como hoja de matarife
y luego restañar heridas con goteo de metáforas.
Y más: poemas y poesía continúan sin concurrir a mercados.
Señal de que algo continúa en vuelo.
Mariposa de última instancia, candelilla y poro, lleva polvo
de astros o astros de polen en las alas. Sol atrae vuelos de Ícaros y golondrinas. Los repele
por la cara oculta. Diluyen extremos, y un día, casi comedia
o mediodía, o causalidad
de horarios, observan filósofos, bardos, físicos,
y acotan con rapidez de almejas y velocidad de columpios.
Melodía conjunta, equívoca, inseparable, polisémica, aparta
poesía de contingencias y grafías inútiles.
Poesía leTRAS, patria enarbola flauta de oración . Plegaria
descocada QUEDa SIN haBLAblaBLA. Mármol extraído y exal-
tado en las plazoletas. Guitarras baten tamborileos. Oleos
de fuEGOS. Clítoris y panes,
vergas y vino. Y barros o fangos o la canción reta
la intrascendencia fosforescente.
ExCITA y exALTA. Susurro sideral. Sobreabundancia.
Opulencia doMINAda. Entidad candente, oruga dinámica, árboles desaforados, efigies perpetuas en moviMIENTO, cascada de quietud.
Poema, al dislocarse, promueve atolondros o lirios en el fondo.
Son huraCANES de gnosis e ignorancias. Poema viene de edades discordes, no se detiene epocal. Gira en oscilación mANUAL.
Ni tan solo melodía o consciencia aGOTAdora, que otro día
deja en blanco la memoria.
Imagen danza el sonido y medita violines.
Piedras retienen heridas. Complicidad de sentidos:
escucho melodías al mirar, océanos al duplicar, cavilamos
a fuerza de protuberancias.
Dudar a tiempo completo sumergidos hasta el tuétano.
Hurgamos tarimas crecientes. Con red de arrastre rastrear
el fondo de la tormenta. Al Universo, lo estampamos: significados temerarios: al final, más significados que universo.
Más realidad y materia circundante. Poesía: cola prensil del tiempo. Apéndice nutrido o magro: traspone temblores, estrellas indecisas
o venideras. Mirar de sombras a conciencia,
con el rabillo erecto de las intuiciones.
Acto arrollador, intenso, conjunción, astros en mordedura,
serpiente mimosa rasgando el panteón de los escotes.
Órganos y orgasmos. Semilla crepitando en el umbral
de las biografías.
Sin necesidad de menos, ni escasez de tutiplenes. Sin enroque
factual de lenguas o palabras asardinadas.
O unir o unidos. Tembleque de que dije lo que no dije y
no dije mi tembleque. Alaridos, desplazamientos inopinados,
desplomes acordados, oleaje arrítmico rompiendo
el borde del acantilado. Sin renuncia
a lo precedente que el mundo ha sido. Ni
a los sueños que el futuro encabece
o le vayan a ser decapitados.
Continuar, considerar. Atareado recapacitar. Nacer y renacer.
FELIX GUERRA
POEMAS DE LA SANGRE COTIDIANA.
ABRIL 2012.