“Mira lo que la luz hizo ahora”. Muy breve antología de poemas de Francisco Martínez.

Tigres

A veces me siento en un cuarto vacío. Es mi mente.
Ese cuarto se convierte en un terreno baldío, sin vida, sucio, descuidado.

A veces ese baldío se convierte en una selva y estoy rodeado de maleza.
En ocasiones escucho a un tigre acechándome.
Ese tigre,

Eres tú.

Aves

Esa postal de aves que un día me regalaste es lo único que me queda de ti.

Cuando por un instante supiste que amaba a los seres
Que se mueven suave y libremente por la vida.

Como tú.

Escorpión

Pararse a la orilla del edificio y no sentir la nausea.
El avión que sube y no se desploma.
El auto que frena, el barco que arriba,
La obscuridad que llega y no atrae al temor.
Las palabras que se hablan como si fueran dictadas.
La lista sin incisos,
El hola en repetición y el adiós inalcanzable.

La belleza es un plano holandés.

Tour de France

Extrañar es un lujo.
Como el que teniendo el oro,
Subestima al tiempo.

Ofrenda de paz

Romper y armarlo, sí.
O no, reinventarlo.

El árbol no deja de crecer,
El agua le da vida de vez en cuando.

Destapar los espejos,
Perdonar el silencio.

El ave herida en tu jardín,
Que en tus manos reverdece.

Vuela.

Balún Canán

Mi casa está hecha de raíz.
Escala por las paredes.
No es de barro,
Ni siquiera de concreto.

No solo vivo yo,
También mis reflejos.
A veces mi padre,
A veces otros.

Mi hogar no tiene dirección.
Quisiera encontrarlo.
No me lamento.

ORO

Nada es más brillante que la ausencia.
El abandono del misterio,
La aceptación del lugar.

La definición del reflejo
Y el trazo del camino.
El ser y el estar,
La omnipresencia humana.

Sentir es definirse,
Aceptar la fragilidad.
Ladrillo a ladrillo
Construir la fortaleza.

La conquista de la montaña
Y la debilidad del papel.
Eso es, eso es.

Francisco Martínez
Francisco Martínez

Piscis.

Desde un remoto lugar,

Desde otra generación.

0 Comentarios
Retroalimentación en línea
Ver todos los comentarios